Cuida de tus preservativos.
Tanto los preservativos masculinos y femeninos como las barreras de látex, son métodos anticonceptivos seguros, sin hormonas, y que además te protegen de la transmisión de enfermedades de transmisión sexual. Gracias a las campañas de prevención en distintos medios hemos aprendido a cuidar de nuestra salud sexual usando estos métodos pero, ¿Sabemos nosotros como cuidar de nuestros preservativos o barreras adecuadamente? Sigue leyendo y te enseñaremos como hacerlo.
En primer lugar debemos de rechazar el uso de profilácticos que no estén en buen estado, si el envoltorio se ha abierto o está rajado no lo uses. Te habrás dado cuenta al abrir un preservativo que en el envoltorio se encuentra cubierto por lubricante, este lubricante, además de facilitar la penetración mantiene el preservativo hidratado para que no se estropee. Si el envoltorio está abierto o rajado, este lubricante puede haberse secado y el preservativo o barrera no serán seguros para su uso.
Comprueba la fecha de caducidad. El lubricante que mencionamos anteriormente tiene una fecha a partir de la cual, empieza a perder sus propiedades, por lo tanto, debes de rechazar el uso de profilácticos cuya fecha de caducidad sea anterior al día actual.
Guarda tus preservativos y barreras en un lugar apartado de fuentes de luz o calor, ya que la luz y el calor pueden deteriorar el látex del cual están fabricados, provocando pequeñas fisuras que aunque no se vean a simple vista, pueden acabar por romper el preservativo o la barrera durante el acto sexual. No es seguro guardar los preservativos en la guantera del coche, porque cuando lo aparcas al sol, el calor que se produce en el interior del vehículo puede dañar tus preservativos o barreras de látex.
Ojo con llevar los preservativos y barreras en el bolsillo, porque además del calor que produce el cuerpo y que ya mencionamos, en el bolsillo se produce rozamiento que incrementa la temperatura y puede deteriorar el envoltorio. Para evitar esto, cambia regularmente el preservativo y desecha el que lleve un tiempo, o utiliza una condonera para guardar los preservativos evitando el roce con la ropa.
A la hora de abrir el preservativo o la barrera de látex utiliza los dedos, no utilices nunca los dientes, uñas o tijeras, y cuando lo coloques presta atención a no rasgarlo con las uñas o anillos que lleves puestos. Como te hemos dicho anteriormente las pequeñas fisuras pueden pasar desapercibidas pero pueden provocar que el preservativo o barrera se rompan durante el acto sexual.
Si cumples estas pautas, te asegurarás de que tus preservativos o barreras de látex están en buen estado y de que te van a proteger contra embarazos no deseados o enfermedades de transmisión sexual. Cuídalos para que ellos te protejan a ti.